Nacidas y criadas en Del Viso. Son las secretarias del Club Unión: Gabriela Bazar (25), profesora de Educación Física, y Cecilia Carlotto (27), mamá de Benjamín de 2 años y medio.
Cecilia estudió en el Parroquial desde jardín hasta finalizar el secundario. Gaby hizo la primaria en el Cervantes y la secundaria en el Fátima. Ambas fueron criadas entre primas, primos, hermanas, hermanos. Pura familia delvisense.
“Tuvimos una infancia de barrio, bombitas de agua, plaza, mancha”, describen esa maravillosa etapa de la vida. Después la adolescencia traería las primeras salidas nocturnas.
“Mi primera salida fue con Ceci, también estaba Vero Carlotto, yo tenía 15 años y me llevaron a Oxígeno, en Tortuguitas”, sonríe y recuerda Gaby. “Todavía salimos juntas, el finde pasado fuimos con Víctor, mi hermano, nos llevó a Pilar y Tortuguitas”, completa.
“Hicimos un tour. Yo empecé a salir hace poquito. Como tuve a mi hijo estuve dos años dedicada a él y ahora empecé a reencontrarme con amigas y amigos”, comparte Cecilia.
Además de estar unidas por el corazón, ambas trabajan en la secretaría del Club Unión Del Viso. Desde hace dos años son la cara visible de la institución. De lunes a viernes de 17 a 21 hs. están en la parte de atención a los socios.
-Nosotras nos encargamos de inscribir a los socios, informar sobre los alquileres de salones, las actividades y disciplinas que hay, horarios, también tenemos que ver toda la parte de mantenimiento, si se rompe algo informar para que se arregle, la parte de seguridad, en el club hay muchos niños así que es importante que sea seguro – declara Gaby.
-¿Cómo lo ven al club?
-Yo lo tomo como familiar, más allá que a mí me dieron permiso de trabajar con mi hijo, veo que la gente también va en familia, cuando compiten va la mamá, el papá, todos a alentar, en casi todas las disciplinas pasa eso. Es muy lindo – responde Ceci.
Testigos directas del crecimiento de los últimos años, valoran mucho el progreso del club, especialmente la parte edilicia.
“Ahora tenemos baños nuevos. Se pintó todo el club. Estamos siempre yendo para adelante. También forma parte de nuestro trabajo velar para que los socios lo cuiden.”
-Y la gente, ¿cuida?
-Está la que sí y la que no. El que se siente socio y quiere al club, sí ayuda.
Uno de los puntos fuertes para este año es justamente concientizar sobre la limpieza, no arrojar papeles al piso, comida, etc.
-Nosotras vamos contentas a trabajar. Estamos trabajando en Del Viso, donde crecimos. De chica nos han llevado al club, es como nuestra segunda casa.
-¿Qué es lo mejor y lo peor de Del Viso?
-Lo peor es que salís con un poco de miedo. Yo vivo a 6 cuadras del club y a la noche vuelvo en remis – responde Cecilia -. Y lo lindo es que seguís teniendo tu gente, saludás y te conocen, te sentís parte del lugar – coinciden las dos al final de la charla.
Valiosa juventud que apuesta a Del Viso. Y Del Viso, apuesta a ella.
por Víctor Koprivsek
