Quienes aman a sus mascotas pueden entender el valor de esta nota, aún más teniendo en cuenta el frío de las últimas semanas.
“Nosotros somos un grupo de personas que ayudamos a los animales que están en la calle, especialmente perros, le damos asilo, los cuidamos, brindándoles un hogar transitorio o permanente, los alimentamos, los llevamos a vacunar y castrar”, arranca contando Alejandro Suárez (51).
Le consultamos si el grupo tenía nombre, y nos informó que eran proteccionistas individuales que empezaron a juntarse para no sentirse solos.
“Hicimos casitas reforzadas con cartón y material térmico, con colchoncitos, las instalamos en algunos puntos de Derqui pidiendo permiso en los negocios donde suelen arrimarse los perritos, también les confeccionamos ponchitos”, describe el vecino.
“Nos gustaría que esto se vaya difundiendo, porque hay gente que trabaja en soledad, que ayuda mucho y a lo mejor se puede ir armando una red entre todos”.
En el grupo hay vecinas de Derqui, Astolfi y San Miguel. Alejandro estudió en el Copello y el Tratado de Pilar, actualmente es acompañante terapéutico y rehabilitador físico, “ustedes le hicieron una nota a mi madre, se llama Blanca y trabajaba en la Salita de Derqui”, nos dijo agradecido.
El alma de los animales se refleja en sus ojos, a veces vemos pasar caballos cansados, obreros silenciosos tirando de los carros, también perros asustados que duermen en la calle, que padecen frío y hambre. Sabemos que muchos seres humanos están en las mismas condiciones. Esto nos hace pensar en muchas cosas.