Solidaridad vs. indiferencia

La cultura dijo basta: no a los robos en Derqui.

Esta es nuestra ciudad, el lugar que elegimos para vivir, criar a nuestros hijos, llevar adelante nuestros trabajos.

El pasado sábado 25 de abril en la vereda frente a la Plaza Teófilo Tolosa, entre el espacio multicultural Evolution y la iglesia Casa de Fe, se llevó a cabo un evento que combinó cultura con testimonios de familias derquinas víctimas de robos.

“Gracias de corazón por venir hoy y acompañarnos, la idea es estar juntos, esto no puede seguir así. No podemos vivir con miedo”, abrió el evento Marcelo Calderón, vecino de toda la vida e importante referente de la cultura local, quien fuera víctima de un violento robo en su hogar.

“Nosotros nos fuimos de Derqui después del último robo. Ahora vivimos en Tortuguitas pero nuestros hijos estudian acá y nosotros somos docentes y trabajamos acá. Nos cambió la vida para mal”, compartió con los presentes Sergio Morel, esposo de Marcela Colombo.

“Te sentís tan vulnerable que hasta les das las gracias cuando se van. A nosotros también nos llevaron todo, hasta la camioneta. La quemaron a 6 cuadras”, dijo Marcela en el micrófono.

Entre los testimonios de las víctimas la cultura local hizo su aporte: Tía Mary, Tío Dick y Orlando compartieron unas chacareras, también los músicos Ricardo Ávila, Flavio Leguizamón, el Salteño, Marcelo Herrera, Nicolás Peral.

La participación de la valiosa juventud derquina, el grupo Sechu Bombo (que coordina Marcelo Calderón) y el grupo de mimo de la Iglesia Casa de Fe, dejó un sello de esperanza en el corazón de los presentes.

El teatro dijo presente de la mano de Ivana Silva y Caio Ballesteros. Noelia López, artista y docente de la Escuela 11, pintó un bello cuadro en vivo.

Representantes de organizaciones sociales tampoco faltaron a la cita.

“Estoy muy triste, así no era Derqui. Nosotros no queremos esto. Por favor los funcionarios y policías, escúchennos”, sentenció el querido Raúl Cativa, presidente de la Sociedad de Fomento Barrio Cascote.

Ana Bueno y Patricia Vera, de los merenderos Chicos Felices del Barrio Sansouci y Creando Sonrisas del Barrio El Triángulo, respectivamente, tomaron la palabra.

“No queremos este presente para nuestros niños”, señalaron.

Mónica Drewes de la secretaria de Derechos Humanos, Claudia Ávila de la Casa de Cultura de Astolfi, Pico Quinteros del Club Monterrey, Maximiliano Aguirre del Proyecto Redes, Gustavo y Rosana delvisenses responsables del Centro Cultural Latinoamericano del Barrio de Nuñez (CABA), también sentaron posiciones.

“Tampoco puede ser que la gendarmería les pida documentos a los jóvenes que hacen rap en la Teófilo Tolosa mientras los vecinos les señalan los lugares donde están los verdaderos chorros y a ellos los saludan desde el patrullero. Tres veces en un mes robaron a mi familia, salimos hasta en la tapa de Crónica”, afirmó Andrés Ayala.

Vecinos de la Cámara de Comercio local y de la Sociedad de Fomento Monterrey Sur también acompañaron la iniciativa. Y, si bien fueron invitados todos los concejales, funcionarios del gobierno de turno y comisarios, sólo asistieron al evento Juan Pablo Roldán, Federico Achával y Santiago Laurent.

Que cada uno saque sus propias conclusiones.

 

Fue muy importante el testimonio de las familias víctimas de robos. Su amor por Derqui es muy grande. Cuánta tristeza lo que les pasó.
Fue muy importante el testimonio de las familias víctimas de robos. Su amor por Derqui es muy grande. Cuánta tristeza lo que les pasó.
Peor que te roben, que entren a tu casa, es que no le importe a nadie. Si como comunidad no hacemos nada, no merecemos llamarnos derquinos.
Peor que te roben, que entren a tu casa, es que no le importe a nadie. Si como comunidad no hacemos nada, no merecemos llamarnos derquinos.

 

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