Alfredo Anselmi dejó este mundo, pero su recuerdo no

Alfredo “Toto” Anselmi, con Joaquín (atrás), el más chico Benjamín, su nieto, hijo de Eduardo. También están Agustín y Damián en la foto (gentileza de Karina Aguirre).

Guía, amigo, padre, hermano. Partió demasiado pronto para lo mucho que dejó.

Las puertas de su casa siempre abiertas para las mesas largas, los desayunos de compartir un mate y pan con manteca. Y en los días de lluvia, unas ricas tortas fritas.

Una palabra de aliento y el buen consejo de un tipo que la luchó.

Por eso cuando Karina compartió con El Apogeo el dolor de su partida, pronto destinamos esta página en su honor. Hoy que el reconocimiento se mezquina para los tipos nobles vaya este homenaje para Alfredo, quien supo criar 5 hijos y aún más.

Barrio Lumi, calle O´Higgins. Toto le decían. Hace algunos años, que no encierra el calendario, supo atender un boliche que fue leyenda: “Los 14 del andén”, bar al paso en la Estación del San Martín.

Ahí estaba Alfredo con otra buena yunta, el “Chapi” Auzqui. Cosas del barrio que quedan para siempre en el recuerdo y se atesoran en algún lugar del corazón, para no olvidar, vio.

La película Cinema Paradiso cuenta la historia de un joven que partió de su pueblito dejando mucho atrás, un poema hecho de nostalgia, amistad sin revés y buena música para acariciar el alma.

Cuántas historias sencillas de lucha y apego se escriben en silencio junto a las mesas rodeadas de familia, entre risas y anécdotas de las buenas.

Dios te reciba en sus brazos ahora que te fuiste, seguramente habrás escuchado mucho sobre los dolores de la gente humilde que con unas copas de más sueltan penas acodados al estaño de la mañana.

Qué en paz descanses Alfredo, y vaya este abrazo a todos los Anselmi, de familia a familia. Que acá en Derqui, estamos para acompañar.

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