Las palabras no alcanzan

Juventud valiosa

Santiago Rodríguez Ali (16) vive en Del Viso. Fue el ganador de una competencia de oratoria que lo llevó a Londres, donde representó a la Argentina.

Jóvenes de estas tierras, brote y futuro. Semilla del tiempo. Orgullo de los que están. Siempre habrá un lugar entre las páginas de El Apogeo para destacar sus logros y virtudes.

Santiago pasó a 3° año del Polimodal en un colegio de la zona. Participó de una competencia de oratoria y ganó. El premio: un viaje a Londres y la posibilidad de representar a la Argentina.

-Quise probar, vivir la experiencia, para mi sorpresa salí ganador-, cuenta con humildad en una de las oficinas del negocio que lleva adelante su familia desde hace 40 años en pleno centro del pueblo, a metros del paso a nivel de la Ruta 26.

El joven de apenas 16 años es hijo de Cecilia y Ernesto, propietarios de la inmobiliaria Hispana.

-La competencia de oratoria fue organizada por ESU (English Speaking Union) y ESU ARGENTINA. Quienes participamos tuvimos que dar el discurso en la embajada británica-, continúa.

-Me sentí muy bien preparado por mi colegio («Del Viso Day School»), la directora fue mi tutora, Sandra Pinchetti, y, si bien todos los profesores me ayudaron, quiero agradecer especialmente a Scott Lymann.

Con palabras suaves y precisas describe la experiencia vivida luego en Inglaterra, donde estuvo una semana compartiendo con otros chicos del mundo.

-Asistí a cursos de oratoria, actuación e improvisación en el teatro de Shakespeare. Fue buenísimo poder representar a mi país.

Las palabras no son suficientes, ése era el título sobre el cual debía escribir su discurso. Y Santiago así lo hizo.

-En África muere un niño cada 3 segundos, muchas veces decimos: “Pobres chicos…”, pero las palabras no alcanzan. Sobre eso escribí.

Nacido y criado en Del Viso, reconoce que quiere profundamente este lugar.

-Me gusta, quisiera verlo progresar, hay mucho por hacer, creo que habría que darles más lugar a los jóvenes de acá para que puedan hacer cosas.

Macarena (melliza de Santiago), Julieta y Federico, son sus hermanos.

-Sentimos un orgullo enorme, una gran felicidad, salió ganador entre más de 80 concursantes y era el más joven-, dice la mamá con ojos brillosos.

-Santiago, ¿cómo definirías la oratoria?

-Es demostrar tus ideas de una manera que convenza a la audiencia, sin aburrirlos, manteniéndolos entretenidos para que les llegue el mensaje.

-En estos días estuvo la Presidente de Argentina en una ciudad vecina. ¿Qué opinión te merece su oratoria?

-Hay muchas cosas que se pueden imitar de su oratoria porque es muy buena en eso. Es muy talentosa para dar discursos, tal vez da muchos pero bueno, aprovecha su talento-, dice con una sonrisa al final de la entrevista.

 

Uno cada tres segundos, es el título de su discurso (léase al pie). En él hace referencia a una de las realidades más tristes del mundo, la situación de los niños en África.

 


 

Uno cada tres segundos:

 

1… 2 … 3 … Amadi, 1 … 2 … 3 … Awiti, 1 …, 2 …., 3 …. Togo. Tres pequeños niños africanos acaban de morir en las peores condiciones: sequías, hambrunas, enfermedades y guerra. ¿Hasta qué punto estas imágenes apocalípticas parecen estar alejadas de todos nosotros?
Podrían haber sido tomados de una película de ciencia ficción, o incluso de la Biblia, la Tora, o el Coram. PERO no lo fueron. Estas son sólo algunas de las terribles cargas que Amadi, Togo y Awiti han llevado consigo antes de morir. Los números de personas que mueren en África diariamente son alarmantes, sorprendentes y terribles.

Cada día los pobres niños sienten el vacío en su vida y renuncian a cualquier esperanza de un futuro mejor. Ellos sienten que sus dolorosas y desesperadas peticiones caen en oídos sordos. Suena como si fuera una causa perdida, tanto para ellos como para nosotros. La mayoría de “nosotros” puede decir con tristeza «pobre chicos», pero nada más. Muy pocas personas, como la Madre Teresa o Nelson Mandela, de verdad hicieron algo notable por aquellos niños sufrientes.

Señoras y señores, quiero gritar al mundo que las acciones hablan más que las palabras. Las palabras no harán nada por la gente hambrienta, pero les puedo asegurar que las acciones sí. Son las acciones las que marcan la diferencia.

Un estudio reciente de la ONU, demostró que de los 50 países más pobres del mundo, ¡los países africanos resultan ser 45 de ellos!! . No perdamos tiempo, a partir de hoy, esta situación debe convertirse en una preocupación mundial, ya que sólo pueden ser resueltos con la ayuda de todo el mundo.

Vamos a ver si se acuerdan de esta canción de John Lennon …. » They’re starving back in China; so finish what you got; Nobody told me there’d be days like these»  (Se mueren de hambre en China ; así que termina lo que tienes; Nadie me dijo que habría días como este)¿Qué ciertas son estas palabras !no? Hoy podríamos aplicar este ejemplo claramente a África Este es el momento en el que luego de que yo haya repetido estas palabras, reflexionemos y comencemos a actuar.

Sintiéndonos,  pero no estando tan lejos de todos estos problemas no nos damos cuenta de lo terrible y grave que la situación realmente es, sobre todo porque pensamos que ayudar no está al alcance nosotros. Un niño muere cada tres segundos en las peores condiciones los seres humanos nunca puede morir.

Sí uno, dos, tres: Amadi se ha ido; Uno, dos, tres: Togo se ha ido; Uno, dos, tres: Awiti acaba de dejarnos.  ¡Uno cada 3 segundos!

¿Recuerdas la última vez que bebiste un vaso de agua o comiste un trozo de pan? Sí, uno se siente culpable. Y ese es un sentimiento certero: no porque hallamos comido o bebido algo, sino porque estamos tan ciegos a la realidad que eso nos hace cómplices y con desprecio decimos que no podemos hacer nada.

Pero… déjenme preguntarles algo: ¿Estas palabras hacen algo para cambiar el mundo? ¡Por supuesto que no! no son suficientes. Lo más que podrían llegar a hacer es hacernos sentir un poco de remordimiento y de falta de responsabilidad durante los escasos minutos en que me dirijo a ustedes … Eso pronto pasara al olvido. Pronto otro  candidato dará otro discurso!

Por supuesto, ustedes podrían estar pensando por qué digo que las palabras no son suficientes y al mismo tiempo estoy  participando en una competencia de oratoria pública! Puede sonar contradictorio, pero no lo es! Este puede ser mi primer paso hacia el mundo y hacia una audiencia mundial que  me escuche para luego actuar junto a mí!

A pesar de que mis palabras pueden no ser suficientes, mi presentación delante de todos ustedes es una acción real para la toma de conciencia de este terrible problema. Una vez Churchill dijo: «Nos ganamos la vida con lo que obtenemos, pero hacemos una vida con lo que damos »

Yo soy una de esas personas que creen que debemos justificar nuestra existencia en la Tierra a través de las acciones! Siguiendo el consejo de Churchill nos convertiremos en  mejores ciudadanos del mundo. ¡Vamos a hacer algo para los africanos! ¿Cómo? ¡Por acciones! ¡Estoy empezando la mía hoy!

3,2,1 La cuenta regresiva sigue y sigue, en estos cinco minutos de discurso 6.000 africanos , acaban de morir.

Para terminar con mi discurso les pido que me den su máxima atención.
Shhhhhhhhhhhhh escuchen atentamente … .. shhhhh …. Pueden oír a las madres de Awiti, Amadi y Togo llorando? Yo puedo … Es por eso que mi presentación en este día es una verdadera acción para comenzar!

¡Muchas gracias!

Santiago Rodríguez Alí

 

Nota de editor:
Santiago Cursa en «Del Viso Day School».
Sandra Pinchetti (Directora) y Scott Lymann (profesor) fueron sus guías en la preparación del discurso.
La competencia fue organizada por ESU (English Speaking Union) y ESU ARGENTINA.

 

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