por Victor Koprivsek
En esta edición de abril del dos mil veinte quería preguntarte cómo estás, mandarte un abrazo enorme, desearte de todo corazón que la estés llevando lo mejor posible, transitando el día a día con la conciencia de saber que esto pasará pero que tenemos mucho que aprender.
Que Dios habite tu hogar, que lo llene de amor, que puedan, todos los que comparten tu casa, vivir estos días de cuarentena en armonía. Sé que no debe ser fácil, sobre todo si estás apretado económicamente, eso genera discusiones, división. Como el país, viste.
Por eso hay que estar unidos.
Y, aunque sea un ratito, hace todo lo posible por rozar la alegría. Vale la pena. Es antídoto, sube las defensas. No la pierdas.
Tampoco dejes de mandar un mensajito a los seres queridos que están resguardados en sus casas. Padre, madre, abuela, tías, tíos, hermanas, hermanos, sobrinos, primas, amistades. Acordate que nos cuidamos entre todos.
El sacrificio es grande, lo sé, pero los países que no lo hicieron a tiempo, hoy sufren más. ¿Te imaginás ese dolor? Cientos de muertos sin poder despedirse ni estar acompañados por su familia. Sin un entierro digno.
Por eso, hoy agradecé la vida. Abrí los ojos y no tengas reparo en adentrarte a las horas del día con una sonrisa, porque estás vivo. Es una oportunidad única.
El fallecimiento de un vecino de Derqui por Covid-19 debe hacernos tomar conciencia, entender que esto es serio, que merece nuestro compromiso.
Realmente deseamos de todo corazón que la familia de la persona que murió a raíz de esta enfermedad pueda seguir adelante, sobreponerse a la pérdida, no quebrarse sino, con ayuda de Dios, estar más firme que nunca para resistir con mucho amor este momento.
Y al resto de la comunidad, por favor, no aflojar con la cuarentena. Con los cuidados preventivos que por todos los medios posibles, se difunden.
HAY QUE TOMAR CONCIENCIA Y NO SALIR DE SUS HOGARES SI NO ES IMPERIOSAMENTE NECESARIO.
Y si lo hacen, tomar los recaudos correspondientes.
Es muy duro de escribir y decir, pero es la verdad, si una persona se contagia de Covid-19 ahora, la familia no la puede visitar cuando está internada y si esa persona fallece, Dios quiera que no, tampoco la pueden despedir como es la costumbre.
También es importante tener en cuenta esta situación sobre todo para tomar conciencia y no andar dando vueltas sin necesidad.
Al menos hasta que esto pase. Y va a pasar.