El reencuentro de dos ex compañeros de la Escuela Nº 24, de Maquinista Savio, partido de Pilar, entonces Del Viso.
Por Rubén Faustino Cabrera
El director de El Apogeo de Del Viso, Víctor Koprivsek, y yo charlamos en la vereda de mi casa, cuando se acerca a saludarnos Diana Noemí Kulesa, una ex compañera de la escuela citada, cuando toda esa zona pertenecía a Del Viso. Hoy, la escuela, que en ese entonces se encontraba en el medio de un predio con plantas frutales y delimitado por centenarios eucaliptus sobre la Ruta 26 (entonces Ruta Provincial 2014), se encuentra sobre la ruta y se identifica como Escuela EGB Nº 24 “Cte. Luis Piedrabuena”, de Maquinista Savio, Partido de Pilar.
En 1957, Diana y quien escribe esta nota teníamos ocho años y cursábamos tercer grado. Las únicas dos aulas, una pequeña y una grande, cabían en un gran recinto, una prefabricada con techo de chapas donde concurrían todos los alumnos, desde Primero inferior hasta 6º grado. (Entonces existía primero inferior, primero superior y sexto grado. No como actualmente, de primero a séptimo).
Entre las maestras, Marta Di Paolo, madre de la actriz y modelo Andrea Frigerio, y esposa de Enrique Mitchelstein, destacado jugador de Deportiva Francesa (la querida Tiva, de Del Viso) e integrante de Los Pumas, el seleccionado argentino de rugby. En la foto grupal, un servidor aparece a la izquierda de la foto, segunda fila, al lado de Alda, con vincha blanca, y Diana en la misma fila, al medio, con un saquito. Abajo, sentada, Esther Rosa Cabrera, hermana del autor de esta nota, con moño blanco, primero inferior.
Una canilla, en medio de los árboles frutales, abastecía de agua a los alumnos.
Diana recuerda algunos apellidos: Gauna, Müller, Alfaro, Coletta, Koslap, Miguens, Maranguina, Salazar… “Rubén Cabrera”, dice, “nos tiraba abrojos a las chicas, en el pelo”.
Anécdotas, recuerdos, sensaciones que arrancan un lagrimón y entibian el alma.
El vecino escritor
Rubén Cabrera, escritor delvisense y autor de esta nota, presentó en la Feria del Libro 2024 su último libro con Editorial Bonsai, Cuentos de terror, con microrrelatos y cuentos más extensos, todos de su autoría. Se trata de un minilibro de 296 páginas y con dos tapas distintas. Cabrera ya ha publicado varios títulos con Editorial Bonsai, entre ellos Drácula y El diario de Ana Frank (condensados), Poesía latinoamericana y Cuentos de terror II (compilados), Guevara. Discursos y frases (textos y condensación de textos), Déjá vu (romántico), entre otros. El minilibro, con el mismo texto, apareció con dos tapas distintas, una con la máscara de la saga de Scream, y otro con una imagen al estilo de las películas del maestro del suspenso, Alfred Hitchcock.